En una reciente entrevista en "La Contra" de La Vanguardia, Richard J. Roberts, premio Nobel de medicina en 1993, afirma que "el f�rmaco que cura del todo no es rentable". Esta es su conclusi�n despu�s de constatar de primera mano c�mo funciona la industria farmac�utica: "He comprobado como en algunos casos los investigadores dependientes de fondos privados hubieran descubierto medicinas mucho m�s eficaces que hubieran acabado por completo con una enfermedad (...) [Pero] las farmac�uticas no est�n tan interesadas en curarle a usted como en sacarle el dinero, as� que esa investigaci�n, de repente, es desviada hacia el descubrimiento de medicinas que no curan del todo, sino que cronifican la enfermedad y le hacen experimentar una mejor�a que desaparece cuando deja de tomar el medicamento."
Roberts opina que la rentabilidad es un criterio adecuado para otras industrias, pero no para la farmac�utica. "Si s�lo piensas en los beneficios, dejas de preocuparte por servir a los seres humanos (...) La salud no puede ser un mercado m�s ni puede entenderse como un medio para ganar dinero." En este sentido defiende un mayor protagonismo del sector p�blico en el �mbito de la investigaci�n m�dica.
No entro a discutir si los hechos que menciona Roberts son ciertos o matizables. El problema es que de estos casos particulares no se sigue que la industria farmac�utica sea "distinta" o que el criterio de la rentabilidad sea inapropiado si la finalidad es curar enfermedades (ni, por ende, que el Estado deba jugar un papel m�s preponderante).
A primera vista la tesis de Roberts es veros�mil. Si una empresa cura una enfermedad se queda sin pacientes/consumidores. Si la cronifica puede obtener ingresos durante toda la vida de los pacientes. No obstante, si los consumidores est�n dispuestos a pagar por el f�rmaco que acaba con la enfermedad, significa que producirlo es rentable. La empresa que vende el f�rmaco que la cronifica quiz�s prefiere el status quo, �pero qu� hay de sus competidores? �Acaso no se beneficiar�an de sacar a la venta ese f�rmaco y hacerse con el mercado de la primera?
Curar del todo es rentable en tanto puedas obtener de los consumidores unos ingresos mayores que tus costes. La tesis de Roberts es que para la empresa A es a�n m�s rentable cronificar la enfermedad que curarla. Desde el punto de vista particular de esta empresa, considerada aisladamente o como si gozara de un monopolio, puede ser perfectamente cierto. Si la empresa A tuviera por ley el monopolio de la producci�n de f�rmacos, es posible que le fuera m�s rentable no curar del todo a sus pacientes. Pero solo podr�a actuar de este modo porque no tendr�a competidores.
En el libre mercado la empresa A ya no puede actuar como si estuviera sola, porque sus competidores pueden adelantarse o puede aparecer una nueva empresa que desbanque a todos. Si la empresa A obtiene 100 de beneficios con el f�rmaco que cronifica la enfermedad y obtendr�a solo 5 vendiendo el f�rmaco que la cura, parece que le salga m�s a cuenta seguir como est�. Pero lo contrario es cierto si tenemos en cuenta a sus competidores. Si A decide permanecer igual y una empresa B investiga y descubre el f�rmaco curativo, A se quedar� sin los 100 y sin los 5. La empresa B tiene incentivos para descubrir el f�rmaco y comercializarlo, y eso hace que la empresa A tenga incentivos para descubrirlo y venderlo antes.
�Alguien pone en duda que la cura del sida o la diabetes ser�a extraordinariamente rentable y que por esa raz�n se est�n dedicando recursos ingentes a investigarla? Sin embargo, si el diagn�stico de Roberts fuera correcto, ninguna empresa estar�a investigando una cura para esas enfermedades cr�nicas. De hecho, si a las farmac�uticas les resulta m�s rentable no curarte del todo, a los mec�nicos les resultar� m�s rentable no arreglarte el coche del todo, a los lampistas no arreglarte el calentador del todo o a las compa��as anti-virus propagar virus peri�dicamente. No es que estas estratagemas y fraudes no sucedan o no puedan suceder, pero es improbable que tengan lugar en un mercado abierto, porque si descuidas a tus clientes la vigilante competencia puede arrebatarte el negocio. Por eso el mercado es tan necesario y su supresi�n o restricci�n tan peligrosa, porque instituye incentivos econ�micos para servir bien a los consumidores.
Roberts confunde los incentivos que tiene una empresa aislada con los incentivos de esa empresa en el mercado. Como hemos visto, las empresas en el mercado tienen incentivos econ�micos para descubrir el medicamento m�s eficaz, que es el m�s ansiado por los consumidores. Eso no significa que una empresa no pueda, por un tiempo, ofrecer un mal servicio o un producto inferior (en este caso, un f�rmaco que cronifica la enfermedad en lugar de curarla). Significa que las empresas tender�n a ofrecer el mejor servicio, porque si no lo hacen ser�n expulsadas del mercado por sus competidores, tarde o temprano. Este an�lisis es tan cierto para el sector de las golosinas como para la industria farmac�utica.
Si el sector p�blico toma el relevo en la investigaci�n m�dica, los incentivos econ�micos desaparecen, y la rentabilidad ya no sirve de gu�a para orientar las inversiones. Si se destinan tantos recursos a la investigaci�n de una cura para el sida o la diabetes porque su descubrimiento ser�a incre�blemente rentable, �qu� ganamos haciendo que deje de ser rentable?
Publicado originalmente en Instituto Juan de Mariana (Espa�a)