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Los hombres, que descendieron m�s de 3200 metros en una nave del tama�o de un peque�o cami�n, tambi�n revelaron la intenci�n de Pek�n de tomar la iniciativa de explorar partes remotas e inaccesibles del lecho oce�nico, ricas en petr�leo, minerales y otros recursos que a los chinos se proponen explotar. Y muchos de esos recursos se encuentran, casualmente, en zonas en las que China ha chocado con sus vecinos en lo referido a reclamos territoriales.

Despu�s de plantar bandera, en un acto secreto que fue registrado en un video, Pek�n r�pidamente convirti� la proeza tecnol�gica en un despliegue de bravuconer�a. "Es un gran logro", dijo Liu Feng, director de las inmersiones submarinas, seg�n el China Daily, un diario en ingl�s que comunica las posturas del gobierno al mundo.

Seg�n los expertos, el lecho marino global est� colmado de n�dulos minerales por un valor de varios billones de d�lares, adem�s de muchos objetos de gran importancia, como informaci�n de inteligencia: cables submarinos y cientos de cabezas nucleares que han quedado como restos de las pruebas misil�sticas.

Aunque una sola embarcaci�n peque�a no puede recoger todos esos tesoros, la reciente proeza pone a China en una excelente posici�n para empezar a rastrearlas. "Est�n en las mejores condiciones para lograrlo", dijo Don Walsh, pionero de las inmersiones oce�nicas que recientemente visit� el sumergible y a sus fabricantes en China. "Es un programa muy detallado y cuidadoso."

La peque�a nave -llamada Jiaolong, por el mitol�gico drag�n marino- fue exhibida a fines del mes pasado, tras haber sido desarrollado en secreto durante ocho a�os. Su dise�o le permite descender a mayor profundidad que cualquier otra del mundo, lo que le da a China acceso al 99,8% del lecho marino.

T�cnicamente, es un sumergible, nave que se diferencia de los submarinos por su tama�o peque�o, su necesidad de una nave madre en la superficie y su capacidad de sumergirse a extraordinaria profundidad, pese a la oscuridad y a las enormes presiones submarinas. S�lo hay unos pocos en el mundo.

El Jiaolong est� dise�ado para descender a 7000 metros de profundidad, con lo que supera al sumergible l�der del mundo. El Shinkai 6500, un sumergible japon�s, puede descender hasta los 6500 metros de profundidad, por lo que supera a las naves de todo el mundo, seg�n sus fabricantes. Rusia, Francia y Estados Unidos siguen a la cola de la lista en el rubro descenso a las profundidades.

Los expertos norteamericanos familiarizados con el programa submarino chino dicen que es inusual porque Pek�n tiene poca experiencia en ese campo tan complejo y desalentador. Como consecuencia, China est� actuando con mucha cautela. Las pruebas del Jiaolong empezaron en secreto el a�o pasado y continuar�n hasta 2012, incrementando gradualmente la profundidad de sus inmersiones. "Son muy cautelosos -dijo Walsh-. Sienten respeto por lo que no conocen y trabajan duro para aprender."

Desarrollo cauteloso

En una entrevista, Walsh dijo que los chinos estaban especialmente interesados en evitar la verg�enza de un desastre que podr�a acabar con los acuanautas atrapados o muertos en las profundidades. "Si soy el chico nuevo del barrio -dijo-, debo estar seguro de que tengo derecho a alardear."

Sin embargo, China ya ha empezado a hacer flamear sus banderas. La actitud recuerda a la de los cient�ficos rusos que, en 2007, descendieron y plantaron su bandera en el fondo oce�nico del Polo Norte. Cuando emergieron, los exploradores declararon que la proeza hab�a fortalecido el reclamo de Mosc� sobre casi la mitad del fondo marino del Artico.

Wang Weizong, viceministro chino de Ciencia y Tecnolog�a, dijo que las pruebas marinas del Jiaolong "marcaban un hito" para China y para la exploraci�n global. Los recientes �xitos de la nave "establecen un s�lido cimiento para su uso pr�ctico en el relevamiento de recursos y en la investigaci�n cient�fica".

Pero por lo menos un experto chino cuestion� lo que denomin� "la propaganda actual". El experto en cuesti�n, Weicheng Cui, del Centro Chino de Investigaci�n de Embarcaciones Cient�ficas, que est� construyendo el sumergible, dijo el jueves pasado que las pruebas se hab�an realizado lejos de las islas en disputa "para evitar problemas diplom�ticos".

La ola de publicidad sobre el hecho de haber plantado la bandera china a esa profundidad, agreg�, "no ayuda demasiado a completar el proyecto".
La irrupci�n de China en el arcano mundo de los sumergibles se produce despu�s de a�os de elegir industrias y tecnolog�as importantes para imprimirles un r�pido desarrollo. China se est� apresurando a fabricar supercomputadoras y jumbo jets. Con sus ambiciones pol�ticas en plena expansi�n y sus reclamos territoriales en los mares vecinos, el pa�s ha prestado especial atenci�n a la oceanograf�a y a la construcci�n de una marina de aguas azules, que opere en las profundidades de los oc�anos abiertos.

Estados Unidos goz� en un momento del liderazgo. En 1960 envi� a Walsh, por entonces oficial de la marina, al lugar oce�nico m�s profundo, a casi 11 kil�metros de la superficie. Pero con el correr de las d�cadas, fue superado por Francia, Rusia y, m�s recientemente, por Jap�n.

China inici� su proyecto en 2002. Unos pocos occidentales advirtieron el esfuerzo secreto cuando China encarg� a Rusia que forjara un casco esf�rico de alrededor de 2,2 metros de ancho. Dentro de cualquier sumergible se encuentra la esfera hueca en la que trabajan los acuanautas. Aloja a un piloto y dos observadores que pueden mirar hacia afuera a trav�s de diminutos ojos de buey.

Los expertos estadounidenses dicen que China sali� de compras por todo el mundo para reunir el sofisticado equipamiento de su sumergible. En Estados Unidos compr� luces de avanzada, c�maras y brazos articulados. Cui estim� que el 40% del equipamiento provino del extranjero.

China tambi�n recurri� a Estados Unidos para instrucci�n. En 2005, cinco aprendices de pilotos y un cient�fico participaron en ocho inmersiones en el Alvin, el m�s antiguo y m�s famoso sumergible de grandes profundidades, que es operado por la Instituci�n Oceanogr�fica Woods Hole, de Cape Cod. Aunque el Alvin s�lo puede descender a 4500 metros, ha realizado miles de inmersiones y descubrimientos, y casi todos los expertos lo consideran altamente productivo y muy bien operado. Uno de los pilotos chinos era Ye Cong, ahora piloto del Jiaolong durante sus pruebas marinas. Las del a�o pasado llegaron a los 1000 metros, y las de agosto, a los 3759. El a�o pr�ximo, el Jiaolong se sumergir� hasta los 5000 metros y en 2012 alcanzar� a su profundidad m�xima.

Walsh dijo que el asunto de la bandera provoc� incomodidad entre los que est�n construyendo y probando el nuevo sumergible. "Nos re�mos de eso", dijo, recordando su visita a China. "Yo le dije: �Ah, est�n copiando a los rusos�, y ellos soltaron una risita inc�moda. Estos individuos son bastante apol�ticos y est�n m�s bien asilados [de Pek�n]." "Son tan s�lo contratistas que est�n haciendo su trabajo."

Publicado originalmente en La Naci�n (Argentina)