Para ayudar a mejorar aún más la capacidad futura de lucha contra incendios a bordo de grandes embarcaciones, unos científicos del Laboratorio estadounidense de Investigación Naval (NRL) han formado un equipo interdisciplinario con el fin de desarrollar un robot humanoide para ayudar a extinguir incendios de esa clase. Se decidió que el robot tuviera una forma humanoide por considerarse la más adecuada para operar dentro de entornos diseñados de manera muy minuciosa para la movilidad humana.
El robot para extinción de incendios, llamado SAFFiR, está siendo diseñado para que pueda moverse de forma autónoma por todo el buque, interactuar con personas y combatir al fuego, ocupándose de muchas de las tareas peligrosas de extinción de incendios que normalmente recaen en los seres humanos. El robot bombero debe ser capaz de maniobrar bien en los pasillos estrechos y escalerillas que suelen ser típicos de submarinos y otras embarcaciones, pero que resultan inasumibles o difíciles para robots más tradicionales o sencillos.
El robot SAFFiR está diseñado con tecnología que le permite ver a través del humo, así como detectar gases y desempeñar otras funciones avanzadas. La parte superior de su cuerpo será capaz de manipular sistemas de extinción de fuego. Su batería tiene suficiente energía para 30 minutos de trabajo de extinción de incendios. El robot también será capaz de caminar en todas direcciones, mantener el equilibrio ante los balanceos del buque provocados por el mar y superar obstáculos.
Otro elemento clave del desarrollo de SAFFiR es dotarle de la capacidad para trabajar en equipo con personal humano. Ya se trabaja en el desarrollo de los algoritmos necesarios para que el robot pueda tomar decisiones por su cuenta, y circular por la nave de manera autónoma. Pero para hacer posible que tenga una interacción natural y eficaz con un equipo de humanos, el robot deberá estar provisto de interfaces que le permitan realizar un seguimiento del foco de atención de la persona al mando del equipo, y que también le permitan entender gestos y reaccionar ante ellos, como cuando alguien señale con el dedo hacia una dirección o haga otras señales con las manos. Cuando proceda, la comunicación verbal, lo más natural posible (en una situación de emergencia no hay tiempo de formalismos), puede también ser incorporada, así como otras formas de comunicación y supervisión.
Varios investigadores de la Universidad de Pensilvania y del Virginia Tech, ambas instituciones en Estados Unidos, también están trabajando con el NRL en el proyecto. Los científicos del proyecto planean probar el robot bombero en Septiembre de 2013, en un entorno de fuego real, aunque bajo ciertas condiciones de seguridad, a bordo de un barco retirado del servicio activo.