Lo último en energía verde se llama s0ccket, y es a la vez un balón de fútbol y una fuente de energía renovable portátil.
La original pelota, desarrollada por estudiantes de ingeniería de la Universidad de Harvard, captura la energía que genera una patada o un golpe de cabeza en el balón y la almacena para su uso posterior.
S0ccket, que pesa aproximadamente 150 gramos más que un balón de fútbol normal, recoge suficiente energía en quince minutos de partido para iluminar una lámpara LED durante aproximadamente tres horas. La energía obtenida también puede utilizarse para recargar teléfonos móviles.
Con esta iniciativa, los jóvenes ingenieros pretenden reemplazar las lámparas de queroseno que se usan habitualmente para la iluminación doméstica en los hogares y empresas de las regiones más pobres de África, donde el 95% de la población no tiene acceso a la electricidad.
Además de ser una fuente de energía cara, el queroseno es peligroso (inflamable), su combustión genera 190 millones de toneladas métricas de dióxido de carbono cada año y el humo perjudica a la salud, favoreciendo los problemas respiratorios.
Noticia publicada en Muy Interesante (España)