Noticias | M�dicas | ^Tuvimos que hacer sentir a Saddam que todav�a era importante^, dice su interrogador

Antes de abordar las cuestiones delicadas con Hussein hab�a que tocar sus puntos d�biles, uno de ellos, su ego. Esta era una de las mejores cartas para los interrogadores que tuvieron que estudiar la historia de Irak y ver muchos documentales. En los interrogatorios se llegaba a comparar con los l�deres que hab�an reinado a lo largo de la historia en Irak, uno de ellos, Nabucodonosor rey de Babilonia. Y el FBI le segu�a el juego, incluso, manten�a conversaciones con Saddam para que comparara sus logros y acciones con lo que hicieron sus predecedores en la historia.

"Hicimos investigaciones y estudios de los discursos que Saddam hac�a en p�blico para crear una estrategia que nos sirviera para conseguir ciertas cosas o hacer ciertas preguntas en el curso de una conversaci�n normal". Irinaga afirma que �l y sus compa�eros pasaban horas reunidos para planear una estrategia de preguntas o la direcci�n que llevar�a la conversaci�n.

"Hubo un momento en la misi�n que tuvimos que cambiar la estrategia para hacerlo sentir que todav�a era importante y que (todav�a) se encontraba a cargo de ciertos aspectos de su vida", confiesa. "Ten�amos un agente especializado en Ciencias del Comportamiento analizando en qu� lugar (del interrogatorio) se encontraba Saddam y hacia d�nde iba con sus conversaciones."

El FBI sab�a que el que fuera l�der de Irak entre 1979 y el 2003 estaba muy preocupado por su imagen y c�mo el mundo en general lo iba a recordar: "Su legado y c�mo iba a ser recordado en la historia. �l quer�a ser visto como sus predecesores, como el gran l�der."

"Era respetuoso, sab�a que est�bamos ah� para hacer un trabajo. Solamente una vez vi que su personalidad afloraba. Que era como en los documentales que hab�a visto. S�lo una vez. Era calculador en la forma de hablar, en las palabras que utilizaba".

"Sucedi� en el momento que lo traspasamos a las autoridades iraqu�es, cuando el juez le informaba de los cargos que se le acusaba. Cuando sali� de su celda estaba al lado de �l, y sali�, me dio la mano, me pregunt� c�mo estaba. �l sabia que iba a otro cuarto para reunirse con el juez".

Hussein ment�a sobre las armas para protegerse de Ir�n

El agente que se desempe�� como l�der en los interrogatorios, George Piro, coment� que Hussein ve�a a Al Qaeda como un peligro y dijo al FBI que no se pod�a confiar en una persona como Osama Bin Laden, especialmente en una persona con una barba como la de Bin Laden.

De los interrogatorios se desprende que Hussein ment�a diciendo que ten�a armas de destrucci�n masiva por miedo a Ir�n, su principal amenaza. Pensaba que si los iran�es sab�an lo d�bil que era, habr�an invadido Irak. Hussein tambi�n acept� haber cometido un error de c�lculo con el presidente Bush, ya que nunca esper� que Estados Unidos invadiera Irak y forzara el cambio del r�gimen.

No mostr� remordimientos

Saddam fue enjuiciado por la matanza de 143 civiles chi�tas, el 8 de julio de 1982, en la aldea de Dujail, al norte de Bagdad. Durante los interrogatorios, el tirano hablaba con Irinaga de las matanzas como una necesidad.

"Cuando hablamos de algunos de los cr�menes en contra de la humanidad nunca expres� ninguna clase de remordimientos. Era b�sicamente una necesidad, algo que se ten�a que hacer, lo que nosotros llamamos cr�menes contra la humanidad y de los que su r�gimen fue responsable". "Hac�a las cosas porque cre�a que eran necesarias para seguir en el poder y que su r�gimen siguiera en el poder", explica.

Me dio la mano y me dijo "goodbye"

La siguiente ocasi�n en que el mundo vio a Hussein despu�s de su arresto (13 de diciembre del 2003) fue cuando acudi� a la corte (1 de julio del 2004) para que le informaran los cargos que hab�a en su contra.

Vest�a un traje, pero estaba esposado, con cadenas, y luc�a una barba mejor afeitada. Con una actitud desafiante no reconoci� la jurisdicci�n de la corte y dijo que el verdadero criminal era el presidente Bush.

"Justo antes de que el mundo entero lo viera por primera ocasi�n en una corte iraqu� estaba hablando con �l, pas� un rato en su celda. Habl� con su ingl�s limitado, que era suficiente para contar peque�as historias, y me pregunt� si ten�a hijos". "Me narr� una historia del vicepresidente Taha Yasin Ramadan. Me contaba de un d�a que fueron de cacer�a, creo que de aves, unos 20 a�os atr�s y (Saddam) presumi� de ser un buen tirador".

"Lo estaba preparando para que fuera ante el juez iraqu�. Nunca le dijimos que �ramos del FBI. Creo que �l sospech� que �ramos agentes de inteligencia del gobierno de los Estados Unidos", relata el agente.

Despu�s de haber convivido con Hussein muchas horas entre abril y julio del 2004, Irinaga no lleg� a desarrollar sentimientos por el dictador. Piensa de Saddam lo mismo que pensaba antes de llegar a Irak, aunque opina que posiblemente la barrera del idioma tuvo algo que ver en esto, ya que �l no habla �rabe y un int�rprete del Departamento de Defensa ten�a que traducir sus conversaciones.

"Al despedirme, le dije: Me voy de Irak. �l se refiri� siempre a mi como Mister Todd y sab�a que no iba a regresar. Me dio la mano y me dijo: Goodbye Mister Todd".

Hussein pas� por un largo juicio que dur� casi 14 meses. La corte iraqu� lo sentenci� a morir en la horca. Cuando esto sucedi� (29 de diciembre del 2006), Todd Irinaga estaba en Estados Unidos trabajando en la oficina del FBI de Modesto, California, como agente especial supervisor donde trabaja hasta el d�a de hoy.

Publicado originalmente en RTVE (Espa�a)