Los astrof�sicos calculan la edad del Universo en unos 13.700 millones de a�os. �Qu� representan a esa escala los 70 a�os que puede vivir un hombre?... apenas nada. �Qu� representar�a entonces un �nico segundo en la misma escala?... menos que nada. Esa misma proporci�n casi infinitesimal es la que guarda un attosegundo frente a un segundo. Digamos que un attosegundo es la trillon�sima parte de un segundo, es decir, 10-18 segundos. Un uno seguido de dieciocho ceros. �Para qu� seguir?
Pues bien, un grupo de cient�ficos alemanes del Instituto de �ptica Cu�ntica Max Planck (Berl�n) y de la Universidad de Bielefeld han sido capaces de medir un acontecimiento a esa escala. En concreto, el salto de un electr�n desde un �tomo hasta el �tomo contiguo. Evidentemente no lo han medido con un cron�metro. No. Lo han conseguido por medio de la base te�rica proporcionada por otro cient�fico. Un espa�ol.
Pedro Echenique, del Centro de F�sica de Materiales, instituci�n mixta del Consejo Superior de Investigaciones Cient�ficas (CSIC) y de la Universidad del Pa�s Vasco, ha dise�ado la teor�a que ha permitido medir, por primera vez, el salto de los electrones entre los �tomos de un material s�lido en la escala del attosegundo.
Electr�nica ultrarr�pida
Asombroso pero, �para qu� sirve? Este descubrimiento impulsar� el desarrollo de la electr�nica ultrarr�pida, ya que permitir� aumentar del orden de 100.000 veces la velocidad de la electr�nica actual.
Las conclusiones de la investigaci�n han merecido honores de portada en el n�mero que hoy saca a las calles la revista brit�nica �Nature�, una de las m�s prestigiosas en el �mbito de la Ciencia, galardonada este a�o con el Pr�ncipe de Asturias de Comunicaci�n y Humanidades junto con su competidora m�s reconocida, la estadounidense �Sciencie�.
Echenique valoraba ayer el alcance de la investigaci�n: �Se trata de un primer paso esencial en el camino hacia la electr�nica ultrarr�pida. Esta investigaci�n permite el desarrollo de t�cnicas para capturar carga electr�nica transportada en estructuras at�micas, en la escala temporal del attosegundo. Este descubrimiento abre un nuevo campo de la ciencia en el que converger�n la f�sica de attosegundos y la nanotecnolog�a�.
El transporte controlado de carga el�ctrica por medio de electrones a trav�s de nanocircuitos constituye la base de la electr�nica moderna, la que ha dado paso a los actuales ordenadores, a los aparatos de comunicaci�n y a todo tipo de dispositivos electr�nicos.
Los �unos� y los �ceros�
�En los circuitos electr�nicos avanzados, los electrones son conducidos por medio de un voltaje de microondas, que es capaz de dar paso o cortar la corriente en una fracci�n de nanosegundo. El tiempo de la transici�n entre apagado y encendido -los �unos� y los �ceros� en que est� basada la inform�tica- determina el n�mero de c�lculos que puede ejecutar un ordenador�, destaca el investigador del CSIC.
La velocidad de la transici�n entre apagado y encendido viene limitada por el tiempo que tardan los electrones en saltar entre �tomos. �La distancia entre �tomos contiguos en una mol�cula supone la longitud m�s corta para canalizar o interrumpir la corriente. Podemos crear as� una �electr�nica de Petaherzios� en la que los apagados y encendidos pueden sucederse con una frecuencia cien mil veces superior a la que permite la electr�nica actual�, explica Echenique.
El catedr�tico de la Universidad del Pa�s Vasco y premio Pr�ncipe de Asturias de Investigaci�n 1998 calific� ayer de �feliz coincidencia� el hecho de que la revista �Nature� lleve en su portada un estudio en el que participa un cient�fico espa�ol premiado con el Pr�ncipe de Asturias, justo el mismo d�a en que sus editores van a recibir en Oviedo ese mismo galard�n en su apartado de Comunicaci�n y Humanidades.
Noticia publicada en ABC (Espa�a)